Miles de fieles participaron este jueves en una nueva celebración de San Cayetano, uno de los santos más venerados y más en estos tiempos.
Miles de fieles participaron este jueves en una nueva celebración de San Cayetano, uno de los santos más venerados y más en estos tiempos, por ser el Patrono de la Paz, el Pan y el Trabajo. En Paraná, la parroquia ubicada en calles Ayacucho y Fraternidad, del barrio San Roque, fue el epicentro del encuentro de una jornada especial.
A lo largo del día hubo varias misas, mientras que por la tarde se realizó la tradicional procesión, donde estuvo el nuevo arzobispo de la capital provincial, Raúl Martín, quien tuvo primera fiesta patronal.
Una multitud por San Cayetano
Luego de recorrer las calles junto a los fieles, el arzobispo habló ante una multitud.
“Es una alegría para mí, comenzar este camino en Paraná con la primera fiesta patronal en la que participo y que sea de la mano de San Cayetano, que un santo que es universal y tiene muchos adeptos. Es un santo que ha llegado al corazón de todos y, de una manera especial, a los argentinos”, manifestó.
El arzobispo expresó que el lema de la fiesta fue “San Cayetano, danos”: “En este ‘danos’, no nos quedamos con los brazos cruzados, sino que aceptamos esto que le pedimos al Señor: ‘danos el pan de la Paz’, en la unidad y en la Esperanza. Es algo que tiene que quedar grabado en nuestro corazón”.
Martín explicó que la paz comienza con el don que Dios siembra en cada persona: “Se nos invita a que desarrollemos esa semilla que el Señor sembró en nuestro corazón, porque tenemos que compartirla y nadie da de lo que no tiene”.
El arzobispo recordó que “San Cayetano no se quedó con los brazos cruzados, sino que comprometió su vida para amar a los demás como Jesús lo hizo».