“Nosotros tenemos una posición diferente, la ley se va a tratar recién la semana que viene porque no están los votos, hay tiempo para ir discutiendo y planteando”, indicó Allende.
Se refirió a los discursos “ambivalentes, hay que cambios, hay que estudiar la ley, pero modificar la ley. No cambiarle el nombre es lo de menos, lo que sí es importante es ver, y que no escucho que ningún gremio lo diga, qué fondos necesita la obra social”.
“Quienes fueron intervenidos se quedaron calladitos, porque les sacaron la papa caliente de las manos”, remarcó.
Explicó Allende: “El Iosper debía 40 mil millones de pesos, de los cuales 24 mil eran del último ejercicio, ¿y cómo iba a funcionar? Iba a un rápido quebrando. Lo intervinieron, no dijeron nada, le tiraron la pelota al vecino y ahora chillan como María Magdalena. A mí me parece poco serio desde ese punto de vista, porque nos están dando la razón a lo que nosotros decimos: hay una obra social que los ingresos son insuficientes, que se hace cargo de una prestación que ninguna obra social nacional se hace cargo en su totalidad. Discutamos eso de verdad”.
Afirmó que desde la mesa de negociación UPCN logró “que se incorpore un artículo donde garantice a los trabajadores; por otro lado la solidaridad. No existe obra social que no es solidaria. De cualquier manera, ante la duda escríbase solidaria. No va a atender a nuestro grupo familiar, dicen, otra mentira. Se logró sacar del proyecto la gerenciación por parte de terceros”.